PROYECTO “BARRIOS SOSTENIBLES” EN MANOS DE LA FUNDACIÓN TOMILLO

Fundación Tomillo nace en 1983 con el propósito de contribuir a la mejora social y al desarrollo de la persona. Desde entonces han sido múltiples los proyectos que han liderado basándose en el apoyo a la infancia, la formación, el empleo, el emprendimiento y la innovación social y estudios.

<< “LA GRAN CONCLUSIÓN ES QUE LA TRANSFORMACIÓN SOCIAL PASA NECESARIAMENTE POR UNA TRANSFORMACIÓN PERSONAL Y ORGANIZACIONAL” – CARMEN GARCÍA, PRESIDENTA EJECUTIVA DE LA FUNDACIÓN TOMILLO >>

Uno de sus proyectos más notorios es Barrios Sostenibles. La iniciativa comenzó en 2015, con el fin de insertar una metodología social sistemática, integral y participativa que mejorase el nivel de vida de individuos y familias residentes en el distrito de Usera, en Madrid.

Las actividades llevadas a cabo se orientan hacia la creación de un distrito socialmente más equilibrado, sostenible respecto al medioambiente y más innovador tecnológicamente. La Fundación Tomillo aborda 3 líneas fundamentales, el desempleo juvenil, la contaminación ambiental y la pobreza energética, que soluciona mediante la creación de empleo verde y la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos con el aumento de las zonas verdes.  Su principal misión con esta iniciativa es formar a los más jóvenes en profesiones de futuro vinculadas tanto a la eficiencia energética como al medio ambiente.

Desde 2015, la fundación ha trabajado con 147 familias. El objetivo principal es formar y sensibilizar sobre el ahorro energético, y a través de micro-intervenciones, mejorar la eficiencia energética de las viviendas. Para la formación se dispone de la ayuda de voluntarios de la fundación y un manual de apoyo. Y para las intervenciones, se cuenta con  la contratación de personal de la bolsa de empleo del Programa de Intermediación Laboral de Fundación Tomillo.

Una acción del proyecto Barrios Sostenibles es la creación de las cubiertas vegetales, espacios verdes situados en las azoteas o terrazas de edificios que permiten la vida de las plantas. Aportan grandes beneficios al medioambiente como la disminución de la contaminación y el efecto “isla de calor” (acumulación de calor por la inmensa mole de hormigón de nuestros pavimentos) y beneficios para el propio distrito, como el uso de nuevos espacios, la eficiencia térmica del edificio o la reducción de ruido del exterior.

<<LAS CUBIERTAS VEGETALES DISMINUYEN LA CONTAMINACIÓN Y EL EFECTO “ISLA DE CALOR”. ADEMÁS, APORTAN BENEFICIOS PARA EL EDIFICIO COMO LA EFICIENCIA TÉRMICA Y LA REDUCCIÓN DEL RUIDO>>

Desde su inicio hasta la actualidad, los datos han sido positivos, 570 personas se han sensibilizado con la causa, mas de 53 jóvenes han cumplido con los cursos de formación y 4 cubiertas vegetales han sido instaladas, dos de ellas cuentan incluso con huerto propio.

Además, la Fundación Tomillo junto a las organizaciones de acción social y medioambiental, Conama, Ecodes, Rais y Fundación Hazloposible, forman “Grupos Compartir”. Actualmente, han presentado la guía ‘Experiencias de un cambio sistémico: Factores clave para la reflexión y la acción colaborativa’ enfocada a la necesidad de incorporar una visión multisectorial y multiagente para enfrentar los complejos retos que plantea la sociedad actual y la necesidad de cambio de las organizaciones y trabajadores para conseguirlo.

Para conocer más sobre la fundación y sus proyectos, visite su página web Tomillo.org

Curiosidad: ¿Por qué el nombre de Tomillo? La Fundación decidió adoptar el nombre de esta planta por sus propiedades curativas, su modestia, resistencia y por estar muy extendida en toda España.